Riquel
González, '14
Reseña de Al otro lado
(2004)†
Al otro
lado, escrita y dirigida por Gustavo Loza en el año 2004, es una
película mexicana que cuenta la historia de tres niños que viven
en lugares completamente diferentes en el mundo, pero comparten un sufrimiento
causado por la ausencia de un padre en sus vidas. La película se enfoca
en las vidas de un niño de México, un niño de Cuba, y una
joven de Marruecos. Cada niño reacciona fuertemente a la ausencia de su
padre, y cada uno toma medidas drásticas para tratar de traerlo de
vuelta. La película aborda la inocencia y la ingenuidad de los
niños, pero también retrata de manera diferente las dificultades
a las que los niños con padres ausentes se enfrentan.
Al iniciarse, la
película nos presenta a Prisciliano, un niño mexicano cuyo fuerte
vínculo con su padre se rompe después de su secreta
inmigración a los Estados Unidos. Prisciliano, en un estado de
confusión y depresión emocional, comienza a buscar a su padre.
Inicialmente, pide la ayuda de un amigo de su padre, pero se queda decepcionado
al saber que en realidad él fue quien convenció a su padre a
emigrar. Hacia el final de su episodio, Prisciliano decide tomar el asunto en
sus propias manos y se va en busca de su padre con la ayuda de su mejor amigo.
Prisciliano cree que el "otro lado," donde supuestamente está su padre,
según su madre, es la ciudad que se encuentra frente del lago que
él visita a menudo. Él y su amigo deciden tomar un pequeño
bote de remos para buscar a su padre al "otro lado". El viejo bote de remos,
sin embargo, poco a poco se llena con agua y los dos muchachos casi se ahogan.
Al final de la historia, la madre de Prisciliano le explica que su padre no
volverá durante mucho tiempo, y que él tiene que acostumbrarse a
ser el hombre de la casa.
La segunda
historia de la película nos presenta a Ángel, un niño
cubano que vive con su madre y su abuelo. El padre de Ángel
abandonó a su madre antes de que naciera. Sin saber esto, Ángel
pasa la mayor parte de su vida preguntando por y buscando a su padre. La madre
de Ángel es supuestamente una prostituta, y se preocupa poco por las
preguntas de su hijo. La historia de Ángel toma un giro dramático
cuando él y su mejor amigo, Walter, en busca de su padre, se lanzan al
océano con una llanta con la esperanza de llegar a los Estados Unidos.
El plan de Ángel falla, sin embargo, y las fuertes corrientes del
océano voltean su llanta, tirando a Walter y a él al agua.
Afortunadamente, Ángel puede regresar a la llanta. Walter,
desafortunadamente, se ahoga. No es hasta el final de la historia, al enterarse
de cómo murió Walter, que la madre de Ángel le dice que su
padre no sabe que tiene un hijo.
La última
historia de la película nos presenta a Fátima, una joven de diez
años que vive en Marruecos con su madre y sus hermanitos. El padre de
Fátima vive en España, y ella está dedicada a encontrarlo
para llevarlo de vuelta a Marruecos. De los tres personajes de la
película, Fátima es quizás la que toma más
iniciativa drástica para encontrar a su padre. Sin pensarlo dos veces,
se sube a un autobús y recorre el país entero con el reto de
cruzar la frontera española. Una vez en la frontera, sin embargo, no
puede entrar porque es menor de edad y no tiene pasaporte ni visa. Cuando busca
a alguien que la pueda ayudar, Fátima cae en las manos de unos
traficantes de seres humanos. Inicialmente, los hombres que la tienen intentan
venderla a otra mujer, pero una vez que la mujer se niega a aceptarla, los
hombres comienzan a buscar otros lugares para deshacerse de ella.
Afortunadamente para Fátima, la mujer que se negó a comprarla
inicialmente regresa para llevarla a su padre. Al encontrar a su padre, sin
embargo, Fátima se queda inmensamente desilusionada porque descubre que
él está viviendo con otra mujer. Aunque él regresa con
ella a Marruecos, queda claro que tiene la intención de regresar a
España.
Cada una de estas
historias tiene éxito en ilustrar las dificultades a las que se
enfrentan los niños cuando les hace falta un padre. En particular, creo
que las historias de Fátima y Prisciliano representan niños que
son emocionalmente afectados por la inmigración de sus padres. Es claro
que el viaje del inmigrante, sin importar cuánta recompensa tenga, se
basa en la despedida y la privaciones de familiares en ambos lados de la
frontera inmigrante; es decir, no es sólo difícil para los que
están inmigrando, sino también para los familiares que se quedan
atrás, particularmente los niños. Al otro lado da una
perspectiva infantil a un asunto que por lo general está interpretado
desde el punto de vista de un adulto.
† Esta reseña se
escribió como parte del curso "Composición y Conversación"
(SPAN 301) enseñado en el otoño de 2011 por la profesora Cynthia
Stone. |